Tratamiento de la espina bífida en fisioterapia

Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Espina Bífida, desde NOGA Fisioterapia, queremos relataros en qué consiste esta enfermedad y qué papel cumple la fisioterapia en su tratamiento.

Qué es la espina bífida

La espina bífida es una anomalía que aparece durante la fase embrionaria de la formación del feto. Consiste en una malformación de la columna vertebral que se produce cuando esta no se sella correctamente durante el embarazo, dejando la médula ósea desprotegida.

La causa de esta enfermedad todavía es desconocida, aunque diversos estudios apuntan como causa de su aparición a la carencia de ácido fólico.

Aunque se han desarrollado diversas pruebas para diagnosticar la espina bífida durante la gestación, en muchas ocasiones la malformación no es perceptible hasta después del alumbramiento.

Tipos de espina bífida

Las consecuencias de esta anomalía para el niño dependen fundamentalmente de su tipología y ubicación, siendo cada caso diferente. Los tipos de espina bífida según su localización son:

  • Zona dorsolumbar
  • Zona torácica
  • Zona cervical
  • Zona lumbosacra

También existe otra clasificación según la alteración de vértebras y meninges:

  • Espina bífida oculta: la gravedad y el efecto que provoca son menores. No provoca alteraciones neurológicas. Normalmente se detecta de forma tardía a través de una radiografía posterior, ya que los síntomas son mínimos.
  • Espina bífida quística o abierta: es la categoría de esta enfermedad más grave y más frecuente.
    • Meningocele: aunque no es tan benigna como la espina bífida oculta, las alteraciones neurológicas y los síntomas son mínimos. Suele ubicarse en la región lumbosacra.
    • Mielomeningocele: las consecuencias son más evidentes debido a la formación de un quiste que contiene médula espinal, raíces nerviosas, meninges y líquido cefalorraquídeo.

Este tipo de espina bífida genera importantes lesiones y limita considerablemente la autonomía y la calidad de vida del paciente. Además, se suele ubicar en la región lumbosacra.

Enfermedades derivadas

A raíz de esta patología, el paciente también puede desarrollar alteraciones secundarias derivadas de la misma. Normalmente, estás implicarán una disminución de las capacidades de percepción y cognición, trastornos genitourinarios, disfunciones motrices o aparición de hidrocefalia.

Estas dolencias secundarias pueden derivar en problemas de visión y comprensión del entorno, renales (incontinencia, lesiones o problemas sociales) o alteraciones en la coordinación, destreza manual, dificultad motriz.

Para tratar este cuadro, es imprescindible comenzar una terapia fisioterapéutica multidisciplinar destinada a paliar las afecciones que aparecen a consecuencia de la espina bífida.

Tratamiento de la espina bífida en fisioterapia

Los primeros meses desde el nacimiento del paciente son realmente importantes en el desarrollo de las capacidades físicas, la movilidad independiente y la prevención de otras deformidades.

Por tanto, la terapia se suele dividir en cuatro fases, que van desde el nacimiento a los seis meses (De los cuales un par puede permanecer hospitalizado), después hasta los doce meses, seguidamente hasta los 18 y a partir del año y medio.

¿Cuál es el papel del fisioterapeuta? En primer lugar, tendrá que realizar un examen completo del niño para establecer un diagnóstico un tratamiento adecuado al mismo.

Los objetivos principales de la aplicación de la fisioterapia al tratamiento de la espina bífida son desarrollar las habilidades motrices y la movilidad. Para ello, se establece un ciclo terapéutico adaptado a la edad y situación del niño.

Durante el primer año y medio, el tratamiento incidirá en el cuidado postural, la confección de aparatos de protección, etc. A partir de entonces, se trabajará la movilidad de las articulaciones del miembro inferior o la reeducación de la marcha.

En el tratamiento de la espina bífida a través de la fisioterapia es importante tratar cada caso de manera individual y con una correcta evaluación de la evolución del paciente. Además, resulta crucial informar a los padres sobre el proceso y sus características.

En NOGA Fisioterapia, nuestra clínica de fisioterapia en Murcia, estamos preparados para aportar toda la información, atención y rigor en el tratamiento de la espina bífida, y la prevención de alteraciones secundarias derivadas de esta.